Alcuronio cloruro

Sinónimos.

Dialilnortoxiferina. Dialiltoxiferina.

Acción terapéutica.

Relajante muscular.

Propiedades.

Es un derivado sintético de la toxiferina, alcaloide del curare con acción curarizante de tipo despolarizante, cuyo efecto es antagonizado por los inhibidores de la colinesterasa. Actúa sobre la placa neuromuscular terminal e interrumpe la transmisión del impulso nervioso al competir con la acetilcolina por la unión al receptor postsináptico. Es una y media a dos veces más potente que la D-tubocurarina y su acción es ligeramente más breve. El efecto se observa pasados 30 segundos luego de su administración intravenosa; la relajación muscular completa se produce a los 2 a 4 minutos y desaparece en 20 a 30 minutos. El cloruro de alcuronio carece de acción vagolítica, gangliopléjica o derivada de la liberación de histamina. La liberación de potasio, el equilibrio electrolítico, la presión intraocular y la coagulación sanguínea no son afectados por este fármaco.

Indicaciones.

Relajación muscular en cirugía.

Dosificación.

Adultos: dosis inicial de 0,250mg/kg y complementarias de 0,030mg/kg con intervalos de 15 a 25 minutos. Niños prematuros: 0,100mg/kg; niños de término: 0,200mg/kg.

Reacciones adversas.

Hipotensión, broncospasmo, arritmias cardíacas, reacciones cutáneas y síntomas gastrointestinales. También puede observarse hipertensión y taquicardia.

Precauciones y advertencias.

Durante la administración los pacientes deben ser ventilados mecánicamente y mantenidos bajo vigilancia. No se han demostrado efectos adversos durante el embarazo; sin embargo, su administración se evita en los primeros meses. Administrar con precaución en pacientes con insuficiencia renal, hipersensibilidad a drogas despolarizantes y en aquellos con enfermedades neuromusculares como esclerosis lateral amiotrófica, miastenia gravis, polimiositis y distrofia muscular.

Interacciones.

No asociar con tiopental, aminoglucósidos, polimixinas, macrólidos, lincomicina, diuréticos tiazídicos, furosemida y ácido etacrínico, gangliopléjicos, quinidina, anestésicos volátiles y sulfato de magnesio.

Sobredosificación.

Parálisis respiratoria y muscular prolongada: el tratamiento es ventilación mecánica y neostigmina (inhibidor de la acetilcolinesterasa).